Karla Castañeda: “Agradezco que Del Toro apoye a una animadora mujer”

Cuando ingresó a la universidad, todavía no se impartían en México licenciaturas ni especializaciones de animación.

Siempre le gustó dibujar y leer, así que mientras en la parte académica se terminaba las materias de literatura de su escuela, por otro lado atendía clases de pintura que terminaron por alejarla del arte convencional.

“A mí lo que más me interesaba era la literatura, entonces me enfoqué mucho en es. Me querían enseñar a hacer manzanas y el cuerpo humano y yo sentía que me contaminaban. Quería poder utilizar muchas técnicas sobre mis dibujos, como óleo o acuarela o grafito u otras cosas pero sin afectar a mis personajes”.

Esos personajes que habitan su imaginación son la muestra viva de que su estilo jamás podrá estar atado a convencionalismos.

Castañeda principalmente trabaja con la técnica de animación stop-motion, con la que ha dirigido dos cortometrajes ganadores del Ariel: Jacinta (2008), sobre una anciana que pasa el final de su vida tejiendo; y La noria (2012), sobre el proceso de duelo de un hombre cuyo hijo pequeño ha muerto.

En ambos, los protagonistas resaltan por tener características físicas que aprovechan al máximo los materiales y el medio en que existen para alejarse del realismo visual.

Hernán Moyano: Contale a la gente un poco de donde viene tu imaginación y tus infancia

Karla Castañeda: Si, yo vengo de un pueblo de muy pocos habitantes. Viví ahí hasta los seis años y fue mi primer acercamiento a lo desconocido, a los fantasmas y todas las historias y leyendas que me contaban ahí. Mi abuelo me decía “Aquí hay un gigante cerca” y como yo era muy tímida, siempre pensaba que un gigante iba a aparecer en mi ventana. Como me crié con las vacas y los caballos y rodeado de ancianos. Casi no hay hombres. Hay mujeres, niños y ancianos. Entonces en ese marco, me fui formando. Mi imaginación viene mas de la literatura y del dibujo que por alguna influencia del lado del cine. 

H.M: ¿En que momento entra la animación en tu vida?

KC: Realmente en la carrera donde estudiaba, era todo muy general. Yo no sabia que era lo que quería e ingresando en el ultimo semestre, me di cuenta que se estaba preparando “Hasta los huesos” que es una pelicula animada y allí dije “Esto se puede hacer en Guadalajara”. Entrando en ese mundo fue cuando me apasione. Tengo mis personajes, mis ideas y mis aventuras. Quería plasmarlo en un cómic, pero cuando vi este mundo, empece a escribir y a preparar mis primeros trabajos. Todo lo que viví lo fui plasmando en “Jacinta” y luego en “La Noria”. Son todas cosas muy personales y dolorosas que he pasado en mi vida.

H.M: Cuando vi “Jacinta” también me remitió a mi abuela.

KC: Si. Este es mi tercer corto y ninguno tiene dialogo. Me gusta mucho eso porque en realidad se transforma en una metáfora que no tiene un narrador. Cada cosa tiene un porque pero no quiero que nadie te lo diga. Es un lenguaje mas universal. Me encantan las películas que no tienen dialogo.

H.M: Cuando vos empezaste, fuiste precursora. No había tradición. 

KC: Si. No existía nada. “Hasta los huesos”, pero no había mucho. Yo aplique al instituto de cine de acá y gane con “Jacinta”. Pero ahora vino Guillermo del Toro y revoluciono todo. Rigo Mora fue otro. Es muy bonito que yo inicie y ahora viene toda esta nueva ola de talentos.

H.M: ¿Como conociste a Guillermo del Toro?

K.C: Fue de casualidad. Yo siempre lo he admirado muchisimo. Lo conocí en Annecy y de pronto me dijo que había visto “Jacinta” y luego le conté de “La Noria”. Una vez me dijo si quería que me produzca. Y le dije “Pues claro”. Cuando le conté de mi largometraje, me dijo “¿Que tal si lo escribimos juntos?”. Y le dije “Pues claro”. Me dijo que lo pensara, pero no tenia nada que pensar. Imaginate. Es un sueño para mi. Aquí en México la gente lo adora y es un tipo muy generoso. Es muy fácil trabajar con él. Tiene una humildad y grandeza enorme. Trabajar con él es un honor. Le conté mi historia, mi infancia y se dio todo muy natural. Y le estoy muy agradecido por haber reparado en apoyar a una mujer. Estoy feliz por la oportunidad. 

H.M: Me impacta la filosofía de Guillermo del Toro de tener que devolver lo que vos tenes para inspirar a otros.

K.C: Si. Guillermo me dijo “Almodovar me dio la posibilidad” y ahora a vos te toca hacer lo mismo e inspirar a otros. Antes no me gustaba dar talleres, pero ahora entendí que es una forma de contagiar la pasión a otros. Sobre todo a los niños. Se me han acercado niñas que no creían que una mujer pudiera ser directora. Es impactante. Claro que se puede. No tenemos que quedarnos en casa cocinando. 

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Su estilo único y su habilidad para narrar historias conmovedoras sin un solo diálogo han llamado la atención de la audiencia y también la del director tapatío Guillermo del Toro, famoso por su apoyo constante a jóvenes talentos del cine en México.

En la más reciente edición del Festival Internacional de Cine de Guadalajara, del Toro anunció que producirá dos películas dirigidas por mujeres mexicanas. Uno será con Issa López, quien ha cosechado más de 20 premios internacionales con su película sobrenatural Vuelven (2017). El otro será el primer largometraje de Karla, mismo que están escribiendo juntos.

Cuando Karla Castañeda habla, pareciera que nada podrá detener el caudal de ideas que le salen como ráfaga por la boca.

Apasionada e intensa, cuenta cómo conoció a del Toro hace tres años en Francia, durante el festival de animación más importante del mundo, Annecy.

“Quería entrar a su masterclass pero estaba abarrotado, me dio boletos él y me dijo ‘vamos a echarnos un café’. Desde ahí tenemos esta amistad… En enero le empecé a escribir que quería hacer un largo. Siempre ha habido mucha honestidad entre nosotros y cuando vino a Guadalajara hablamos y me contó que tenía como un guión que tenía que ver con una historia que yo le conté.

Platicamos mucho tiempo y empezamos a escribir, hasta que dice ‘¿Qué te parece si coescribimos tu largometraje?’,” cuenta.

A Karla le brillan los ojos ante la posibilidad de esta colaboración creativa, pues sumado a esa nueva mancuerna, a los pocos días del Toro anunció que produciría el largometraje. “Producir ya es meterte más en la película,” explica la directora. “Estoy esperando un poco que descanse para seguir con lo que más me emociona: la escritura.